La leche de almendras es una gran alternativa a la leche convencional. Esta leche vegetal es más sabrosa, sencilla de hacer en casa, muy digestiva y rica en calcio.
La receta de la leche de almendras casera es la siguiente:
INGREDIENTES:
- 100 gr. de almendras crudas con piel. No es necesario pelarlas y conseguiremos igualmente un color muy blanco.
- 500 ml de agua.
ELABORACIÓN:
Podemos elaborar la leche de almendras de 2 formas: con una batidora normal y un buen colador, o con una licuadora. Te explicamos ambas:
- ELABORACIÓN CON BATIDORA
- Se trituran las almendras lo máximo posible. Se bate el polvo de almendras con un tercio de agua y después con el resto de agua.
- Se cuela con un colador, si aún queda pasta de almendras se bate y se cuela de nuevo otra vez.
- ELABORACIÓN CON LA LICUADORA
- Remojar las almendras durante unas 24 horas.
- Echar por la boca de la licuadora las almendras junto con los 500 ml de agua poco a poco. Usar agua nueva, no la del remojo.
- Con esa cantidad conseguimos una textura óptima, pero lo podemos hacer más líquido o cremoso, al gusto de cada uno.
- La pulpa resultante se puede poner a remojo de nuevo y usarla al día siguiente para leche de almendras o para añadir a otro zumo y hacerlo más cremoso y nutritivo.
Y tras seguir todos estos pasos ya tendríamos lista nuestra leche de almendras con una receta tan sencilla.
A tener en cuenta:
- Duración: La leche de almendras al ser casera debe consumirse con rapidez. El sabor se puede agriar e incluso estropear.
- Posos: a pesar de haberla colado bien, es posible que persistan los posos.
Foto adquirida de: Upsocl.com