Hefekranz o trenza alemana

La trenza alemana es un tipo de pan dulce y esponjoso que vale la pena probar. Este dulce es originario de Alemania, su nombre es Hefekranz. Consiste en un pan dulce que se presenta trenzado. Por su textura y consistencia, es mejor comer esta trenza el mismo día de la elaboración, aunque bien envuelto aguanta tres días perfectamente.

 

Ingredientes

  • 450g de harina
  • 75g de mantequilla
  • 1 huevo
  • 75g de azúcar
  • 2 cucharadas de levadura seca
  • 200ml de leche
  • Sal
  • 1 huevo batido para untar
  • 100g de pasas sultanas
  • 75g de almendras laminadas
  • Azúcar

 

Preparación

En primer lugar, disuelve la levadura en la leche. Para ello, calienta la leche y echa la levadura, remuévelo y déjalo enfriar. En un bol hondo, tamiza la harina junto con una pizca de sal y haz un hueco en el centro. Bate el huevo y mézclalo con la mantequilla, previamente derretida, el azúcar junto con la leche y la levadura. Mezcla poco a poco todos los ingredientes para que se integren y quede una masa homogénea y lisa. Pásala a una superficie y amasa durante 10 minutos o hasta que ya no se pegue a los dedos y la notes flexible. Agrega las pasas y amasa un poco más hasta que se mezclen bien. Continúa engrasando un bol con aceite, coloca la masa y déjala reposar durante dos horas y media tapada con un paño. Al cabo de este tiempo doblará el volumen. Sácala y golpéala un poco sobre la encimera. A continuación, divídela en tres partes iguales y forma un rollo con cada una. Une los trozos en el extremo superior y forma una trenza suelta, porque doblará su volumen. Colócala en un molde para horno con papel para hornear, tápala y déjala reposar otras dos horas. Mientras que se precalienta el horno a 190º, pinta la masa con huevo batido, espolvorea con azúcar y almendras laminadas y llévala al horno durante 30/35 minutos hasta que se vea dorada. Cuando esté lista sácala y déjala enfriar sobre una rejilla.

 

Esta trenza combina a la perfección con mantequilla o mermelada. Será ideal para servirla en el desayuno o en la merienda junto a tu té favorito.

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