Comer un puñado de nueces, en lugar de galletas o patatas fritas, puede ayudar a evitar el aumento de peso que a menudo acompaña al envejecimiento y es una forma relativamente manejable de ayudar a frenar la aparición de la obesidad, según un nuevo estudio publicado hoy.
Dicho estudio, presentado por la British Medical Journal (BMJ), expone que, entre las más de 8. 000 personas de 50 años o más sometidas a examen, casi cuatro de cada cinco adultos mayores de 50 años tienen sobrepeso u obesidad. Lo que es más importante es que dicho sobrepeso puede tratarse con ayuda de un fruto seco en concreto: las nueces.
Los científicos y nutricionistas están de acuerdo en señalar la importancia de sustituir alimentos poco saludables, como carnes procesadas, dulces y patatas fritas, ya que la mitad de la porción puede ser una estrategia simple para evitar el aumento gradual de peso que a menudo acompaña al proceso de envejecimiento. Si en vez de reducir la ingesta de dichos alimentos son sustituidos por el consumo de nueces, de manera controlada, se obtienen resultados mucho antes y más favorables. Todo ello es gracias a que, en gran medida, estos frutos secos son ricos en grasas no saturadas saludables, vitaminas, minerales y fibra.
Por si fuera poco, el hábito de consumir frutos secos es también bueno para el planeta, pues el uso de proteínas vegetales inocuas para el medio ambiente, como las nueces y las semillas, reemplazan las fuentes animales, contribuyendo a la viabilidad de un sistema alimentario mundial sostenible.