Los frutos secos son tendencia. Las razones que hay detrás para que esto sea así son muchas, ya que al excelente valor nutricional de este tipo de alimentos, se le suma su cómodo formato “on-the-go” o las facilidades que ofrecen para conservarse de una forma más o menos estable en el tiempo y sin atender especialmente a las condiciones ambientales, dos matices que diferencian a los frutos secos de la fruta fresca.
Son muchos sus beneficios; su contenido nutricional es elevado, y muchas semillas tienen un exquisito sabor. Aparte de aportar mucha energía y grasas saludables, nos quitan el antojo de comer cosas dulces. Además están también las frutas deshidratadas, que son aquellas a las que se les ha extraído total o parcialmente sus cantidades de agua, sin eliminar sus propiedades, y permitiendo su conservación por más tiempo. Algunas como las uvas pasas tiene una gran concentración de vitaminas y minerales, concentraciones 4 veces mayores que en su estado natural. Son los que aportan más fibra, lo que es beneficioso para personas que padezcan de estreñimiento.
Por todo esto, se trata de los aperitivos más consumidos por su accesibilidad y sus beneficios para la salud.