La receta de hoy es un acompañamiento perfecto para cualquier plato de carne. Una salsa que no solo está buena, sino que además es fácil de preparar y gracias a la cual conseguirás que los comensales mojen el pan hasta dejar el plato limpio.
Ingredientes:
- ½ dientes de ajo
- 3 tomates cherrys
- 2 rodajas de cebolla
- 60 g de pistachos
- Aceite de oliva virgen
- Pimienta negra
- 1 vaso de nata para cocinar
- 250 g de carne de ternera picada
Preparación:
Empieza pelando los pistachos y, una vez hecho, ponlos en una sartén con un poco de aceite para dorarlos a fuego lento. Evita que se quemen removiendo de vez en cuando. En un recipiente para batir, introduce los tomates, el ½ diente de ajo, las rodajas de cebolla (previamente pelada), los pistachos y pimienta al gusto. Mientras bates, incorpora la nata líquida poco a poco para que la salsa quede bien integrada. Deberá darte como resultado una salsa blanquecina con pequeñas motas verdes y rojas (son los pistachos y los tomates, respectivamente). Cuando prepares la carne en la sartén, evita añadir mucho aceite y, cuando la carne esté hecha por ambos lados, agrega tanta salsa como quieras a la sartén. Mientras se calienta, verás cómo adquiere un color más oscuro. Remueve bien y no dejes que se evapore del todo, solo hasta que adquiera cierto espesor. Ya solo tienes que servir y disfrutar de una salsa que casa con cualquier carne o verduras a la plancha.