Las cifras del Avance de Superficies publicadas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación apuntan que el sector de los frutos secos en España se afianza cada vez más.
La Asociación Española de organizaciones de productores de frutos secos y algarrobas (AEOFRUSE) señala el crecimiento en cuanto a superficie del cultivo del almendro español, que alcanzó las 687.225 hectáreas en 2019, lo que supone un aumento de un 4,48%.
A nivel general la producción nacional se mantiene, siendo un total de 340.421 toneladas cáscara, una producción derivada de los inferiores rendimientos registrados durante la anterior campaña, especialmente en los procedentes de cultivos de secanos.
A día de hoy, el 85% de las hectáreas de almendro en España son de secano, frente al 100% de regadío existente en California, principal productor a nivel mundial.
No obstante, el crecimiento continuo en el sector de los frutos secos responde a una mayor demanda por parte de los consumidores a nivel global. Destaca también la actual situación de confinamiento en España, según el análisis de consumo en el hogar publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Este informe denota que los frutos secos han experimentado fuertes incrementos en las compras por parte de los hogares españoles.
A todo esto hay que sumarle que el consumo de almendra está avalado científicamente por sus valores nutricionales y beneficios para la salud.
Son numerosos los estudios, como el facilitado por Predimed, que atestiguan la correlación entre el consumo frecuente de almendra y una reducción del riesgo de sufrir un infarto, un ictus u otras enfermedades cardiovasculares.